domingo, 20 de diciembre de 2009

Instrucciones para hackear una cuenta de correo electrónico

[Pequeño homenaje a Julio Cortázar, je]

[Cualquier semejanza con la realidad es pura coincidencia]

1) Inscríbase en una carrera de la Universidad de Buenos Aires. Comience a cursar una materia del CBC con la ex novia de un amigo suyo. Procure que, a pesar de sus intentos por alejarse de la muchacha, ésta consiga sentarse todas las clases junto a usted, y comience a gestarse así una forzada relación de amabilidad y comentarios asiduos entre usted y la chica.

2) Procure que la mujer en cuestión desarrolle una sospechosa admiración por usted, y busque llevar la relación que los une hasta afuera de los muros del recinto universitario. Así, los temas de conversación entre ustedes dejarán de estar acotados al estudio y pasarán a tener que ver con los problemas sentimentales de cada uno.

3) Evada las preguntas que la chica le haga sobre su amigo, quien es, a su vez, el ex novio de ella. Trate de no dar datos sobre lo que hizo el muchacho en cuestión el fin de semana, con quién sale, etcétera. Aún así, consiga que la mujer no desista en sus intentos de ganarse su amistad y confianza incondicionales.

4) Al recibir un excesivamente amistoso email de la muchacha, búrlese de ella. Ríase de cada frase halagadora que la chica la haya escrito, subestime toda demostración de afecto, sospeche que ella sólo lo elogia a usted para quitarle información sobre su ex.

5) Con la intención de seguir burlándose de la mujer, decida reenviarle el email a una amiga suya. Escriba algo así como: "Mirá, esta piba es una tarada, me halaga porque quiere sacarme información sobre Fulano".

6) Equivóquese. Presione el botón "Responder" en lugar de "Reenviar". Posteriormente, al ver que su mensaje fue enviado a la casilla de la muchacha en cuestión y no a la de su amiga, resetee la computadora creyendo que eso resolverá el asunto.

7) Mientras la computadora se reinicia, cúlpese a usted mismo. Putéese. Llámese "boludo", "pelotudo", "idiota", etcétera. Arrepiéntase de haberse burlado de la obsesiva mujer. No sepa qué hacer para subsanar su error. Inmediatamente, decida solucionarlo mediante el envío de otro email a la chica, en el que pueda leerse una disculpa tal como: "Che, el otro mail era una joda, jajajajjajajaa".

8) Descrea de la efectividad de lo que acabó de hacer. Siga puteándose.

9) Junte coraje. Decídase. Dígase a usted mismo que hará una maldad, pero que estará justificada. "Evitaré un mal mayor", consuélese. Entonces, ingrese a la casilla de correo electrónico de la muchacha después de elegir la opción "Olvidé mi contraseña".

10) Ante la pregunta secreta de la chica, pruebe respuestas varias. Apele al sentido común, a su intuición, a sus recuerdos, a lo que sea. Finalmente, acierte. Ingrese a la cuenta de correo y borre los dos últimos mensajes que envió.

11) Reciba un email de la chica, desde otra casilla en el que se lea: "Hola!! Leíste el mail que te mandé?? No me respondiste nada, guacha!! Bueno desde ahora escribime a esta dirección porque la otra me la hackearon!! Besos!!".

12) No vuevla a ver a la muchacha.

3 comentarios:

Unknown dijo...

Jajajaja!! menos mal que tenías algo de info... sos una genia, me hiciste reir. Escribí más seguido!!

una sardina dijo...

JAJAJAJAJA SOS UNA ENFERRRRRRRMA!
jajajajajajjajajajaajaj

igual me causó mucha gracia la historia!!!

NATALIA dijo...

Ya sabía de esta historia, pero leerla en clave cortazariana es muy gracioso!